La artista donostiarra Esther Ferrer, galardonada con el Premio Velázquez de Artes Plásticas
Euskara. Kultura. Mundura.
La artista Esther Ferrer (Donostia-San Sebastián, 1937), ha sido galardonada con el Premio Velázquez de Artes Plásticas 2014, que concede el Ministerio de Educación, Cultura y Deporte. El jurado ha destacado la “coherencia” y la “precisión” de la obra desarrollada por Ferrer durante cinco décadas , que se convierte en la segunda mujer en la historia galardonada con el máximo reconocimiento de las Artes Plásticas a nivel estatal. La artista ha recibido con "angustia" la noticia, aunque al final ha aceptado la decisión, por creer en la "independencia del jurado internacional". Aún así, su pretensión -ha declarado a la agencia EFE- "es pasar lo más desapercibida posible".
Ferrer que vive desde hace más de 20 años en París, ha mostrado su obra en numeroas galerías y eventos artísticos de todo el mundo. Ha sido galardonada en numerosas ocasiones; en 2008 obtuvo el Premio Nacional de Artes Plásticas y el pasado febrero el premio Ikus Arteen Emakumeen Saria.
Licenciada en Ciencias Sociales y Periodismo y conocida por sus innovadoras performances, bien individuales o como parte del grupo ZAJ (disuelto en 1996), comenzó a mediados de los 70 una intensa actividad plástica, con fotografías trabajadas, instalaciones y cuadros. En sus “performances", Ferrer ha pasado hablar de mostrar lo inadvertido y las propiedades poéticas del uso de objetos - papeles, dados, la escritura o el alfabeto- a desplazarse hacia problemas asociados con la identidad, lo incomprensible de un lenguaje nuevo, contando siempre con la participación del espectador.
La artista Esther Ferrer (Donostia-San Sebastián, 1937), ha sido galardonada con el Premio Velázquez de Artes Plásticas 2014, que concede el Ministerio de Educación, Cultura y Deporte. El jurado ha destacado la “coherencia” y la “precisión” de la obra desarrollada por Ferrer durante cinco décadas , que se convierte en la segunda mujer en la historia galardonada con el máximo reconocimiento de las Artes Plásticas a nivel estatal. La artista ha recibido con "angustia" la noticia, aunque al final ha aceptado la decisión, por creer en la "independencia del jurado internacional. Aún así, su pretensión -ha declarado a la agencia EFE- "es pasar lo más desapercibida posible".
Ferrer que vive desde hace más de 20 años en París, ha mostrado su obra en numeroas galerías y eventos artísticos de todo el mundo. Ha sido galardonada en numerosas ocasiones; en 2008 obtuvo el Premio Nacional de Artes Plásticas y el pasado febrero el premio Ikus Arteen Emakumeen Saria.
Licenciada en Ciencias Sociales y Periodismo y conocida por sus innovadoras performances, bien individuales o como parte del grupo ZAJ (disuelto en 1996), comenzó a mediados de los 70 una intensa actividad plástica, con fotografías trabajadas, instalaciones y cuadros. En sus “performances", Ferrer ha pasado hablar de mostrar lo inadvertido y las propiedades poéticas del uso de objetos - papeles, dados, la escritura o el alfabeto- a desplazarse hacia problemas asociados con la identidad, lo incomprensible de un lenguaje nuevo, contando siempre con la participación del espectador.
Imagen: Esther Ferrer, "Autorretrato" / Culturizme
