Joseba Sarrionandia publica un libro sobre la vuelta al mundo de Elkano
24/05/2022
Euskara. Kultura. Mundura.
El libro ilustrado ‘Munduari bira eman zion ontzia’ (´El bote que dio la vuelta al mundo´) es fruto de la colaboración entre el escritor vasco Joseba Sarrionandia y el ilustrador cubano Arístides Hernández ‘Ares’. Editado por Pamiela, cuenta con el apoyo de Etxepare Euskal Institutua para su traducción al gallego, catalán y español. La publicación, “un recipiente para la memoria y el espíritu crítico”, ha sido apoyada por la Fundación Elkano con el objetivo de divulgar el conocimiento y la reflexión sobre el viaje de la primera vuelta al mundo. Es un cuento para lectores de todas las edades a partir de 10 años.
Joseba Sarrionandia y Arístides Hernández, acompañados del director de la Fundación Elkano Ion Irurzun y la editora de Pamiela Eli Irazu, han presentado esta mañana el trabajo en el Museo San Telmo de Donostia. El acto ha contacto con la asistencia, asimismo, de Irene Larraza, directora de Etxepare Euskal Institutua, entidad que hará posible la traducción del libro.
La obra recoge el prolongado diálogo que mantiene una profesora de historia con su nieta sobre el viaje de Juan Sebastian Elkano; el relato, interpelado por la niña, que quiere “una historia verdadera” y no más cuentos, da lugar al planteamiento de múltiples problemas actuales, a lo largo de una conversación animada y no carente de ironía. Jugando con el doble significado de la palabra vasca ‘ontzia’ –que puede ser tanto barco, como recipiente– Sarri afirma que el libro es, además, “un recipiente para la memoria y el espíritu crítico”.
En referencia al viaje de Elkano hace 500 años y sus vínculos con la actualidad, Sarrionandia ha afirmado que el pasado no está muerto, “ni siquiera ha acabado de pasar. Aquellos barcos tienen el valor emblemático de una primera globalización, y los portaviones y los satélites de ahora representan la enésima globalización dirigida por gente con mentalidad de banda de ladrones que, con el pretexto de representar a la civilización frente a la barbarie, siguen actuando con sofisticada injusticia.” Por otra parte, el autor confía en que el libro pueda servir para algo: “Vivimos en un tiempo de pensamiento único y móvil, con esa celeridad y la caducidad del móvil, donde un libro parece más una huella de alguien que pasó por allí que una herramienta de comunicación efectiva. Pero sigue siendo un buen recipiente para la memoria y el espíritu crítico. Eso es lo que hemos querido hacer con el texto y los dibujos, una vasija para recordar un poco de historia y observar lo que pasa.”
Ares ha añadido que, para él, el libro ha supuesto un gran aprendizaje: “Ilustrando el libro conocí una historia, la de la vuelta al mundo, que pensaba que conocía bien, pero que en realidad no conocía en absoluto”. También ha sido para él una experiencia nueva en cuanto a la manera de trabajar: “A mí siempre me dan un libro ya escrito con los espacios vacíos para insertar las ilustraciones. Colaborar con Sarri ha sido ver cómo iban surgiendo los textos y las imágenes a cuatro manos y cómo iba adquiriendo forma y sentido el conjunto. Para mí ha sido una manera diferente de trabajar.”